Sturla Vazquez

Cardenal Sturla y presidente Vazquez (Foto del Espectador)

Las religiones en el Uruguay han aumentado su participación en las políticas públicas, especialmente en estos últimos 11 años de gobierno en el Uruguay.

Aunque no resulte obvio en una mirada superficial el actual gobierno ha profundizado y diversificado el vinculo entre el Estado y las organizaciones basadas en la fe. Son cientos los convenios que se ejecutan cotidianamente entre el estado uruguayo y organizaciones religiosas de diversa índole. Desde la apertura democrática comenzó a fortalecerse un vinculo de cooperación entre el estado y el espacio religioso para atender a las demandas sociales. Pero es con la creación del MIDES y con la expansión cuantitativa de políticas sociales gestionadas por el INAU, el MIDES y las intendencias donde las organizaciones religiosas han aumentado su presencia. El Estado ha reconocido a las organizaciones religiosas por su capacidad de gestión, de movilización de voluntariado y su preocupación por la dignidad humana. Esto se ejemplifica con los acuerdos para la gestión de: centros juveniles, centros CAIF y clubes de niño (funcionando en parroquias católicas, evangélicas y umbandistas), SOCAT o centros para atención a víctimas de violencia gestionados por organizaciones religiosas, refugios, proyectos educativo laborales (Tacurú -Salesianos-, Juventud para Cristo (evangélicos), Iglesia Anglicana, entre otros grupos religiosos).

Esta situación consolida los últimos años genera desafíos o al menos preguntas sobre el el vinculo entre lo estatal y lo religioso en nuestro país. ¿Cual es el rol de lo religioso en lo público? ¿El estado debe  considerar o reconocer la dimensión religiosa de las organizaciones religiosas con las que convenia? ¿Como el Estado supervisa o no, la presencia de una perspectiva de derechos humanos en el espacio público no-estatal?

En el Seminario sobre «Laicidad y políticas públicas» se compartieron experiencias actuales de trabajo entre las comunidades de fe o grupos religiosos, que participan junto con el Estado en la gestión de lo público en un sentido amplio. Así mismo reflexiones desde actores con experiencia en este campo como el ex director de Promoción Humana de la Iglesia Anglicana, Psicólogo Social y actual director del INAU Fernando Rodriguez que comparte su perspectiva a nivel personal.

 

Dentro de las experiencias y reflexiones compartidas, también realizo su aporte el presbítero católico y referente del Centro Interreligioso del COMCAR, Javier Galdona.